miércoles, 23 de marzo de 2011

BALANZA COMERCIAL

La balanza comercial es el registro de las importaciones y exportaciones de un país durante un período. El saldo de la misma es la diferencia entre exportaciones e importaciones. Es la diferencia entre los bienes que un país vende al exterior y los que compra a otros países. Hay dos tipos: Positiva: Cuando el valor de las compras es menor que el de las ventas.(Vendes más que compras) Negativa: Cuando el valor de las ventas es menos que el de las compras. ( Compras y no vendes todo).

Es la parte de la balanza de pagos que contempla las importaciones y exportaciones de mercancías o bienes tangibles. Se utiliza para registrar el equilibrio o desequilibrio en el que se encuentran estas transacciones respecto al exterior y se expresan en déficit o superávit; el primero cuando son mayores las importaciones; y el segundo cuando son mayores las exportaciones.


Las importaciones son aquellos gastos que las empresas, los gobiernos o las personas realizan respecto de los bienes y servicios que se hacen en otros países y que se traen al propio, en tanto, las exportaciones son los bienes y servicios que se producen en un determinado país y que luego se venden y envían hacia otros países.
Esta diferencias pueden ser positivas, situación que se llamará superávit comercial o bien negativas que darán en llamarse déficit comercial.
El déficit aparecerá cuando la cantidad que se compara, la de las importaciones y las exportaciones, resulta menor a la otra. Entonces, habrá déficit comercial cuando la cantidad de bienes y servicios que un país exporta sea menor a la cantidad que importa y por el otro lado, cuando la cantidad de bienes y servicios que un país exporta sea superior a la cantidad de bienes que importa, estaremos, a las puertas de lo que se denomina como superávit comercial.

miércoles, 16 de marzo de 2011

EVALUACION SUMATIVA

CUESTIONARIO
"EN CONTACTO CON TUS CONOCIMIENTOS"
¿Cuál es la aportación de los filósofos a la economía?
Desde el siglo XV hasta el siglo XVIII se escribieron numerosos ensayos que desarrollaron los principios del nacionalismo económico como la escuela de pensamiento denominada mercantilismo
¿Cuáles son los antecedentes históricos del sistema tributario en el mundo antiguo?
La recaudación tributaria constituye una fuente de ingresos para el sector público. Nuevas cargas impositivas y la elevación de alícuotas para determinados impuestos han sigo algunos instrumentos que la administración tributaria puso en práctica para incrementar dicha recaudación, sin embargo estas no son los únicas soluciones para mejorar la recaudación tributaria, sino por el contrario la disminución de la evasión tributaria en cada unos de los impuestos que recauda el Gobierno Central.
¿Qué formas de propiedad se establecen en el Medievo?
Considera el feudalismo como un sistema institucional que establece una relación de dependencia entre señor y vasallo, relación de base jurídica y militar y que afecta a las clases dirigentes, constituidas por hombres libres. Se establecía una obligación de fidelidad por parte de un hombre libre hacia otro, de su misma clase, pero de jerarquía superior, que era “señor” del primero. Por su parte, el señor otorgaba un beneficio al vasallo, denominado feudo, generalmente consistía en tierras.


¿Qué es el renacimiento?
Es un fenómeno muy complejo que impregnó todos los ámbitos yendo por tanto, más allá de lo puramente artístico como ha querido verse.
Para muchos autores empieza en 1453 con la conquista turca de Constantinopla.
¿Cuál fue la principal fuente de riqueza durante el feudalismo?
La principal fuente de  riqueza fue la agricultura
¿Cómo se llevo a cabo el comercio durante la edad media?
La esclavitud es una institución jurídica que conlleva a una situación personal por la cual un individuo está bajo el dominio de otro, perdiendo la capacidad de disponer libremente de su propia persona y de sus bienes.
¿Cuáles fueron las aportaciones de los fisiócratas?
William Petty escribió, ya en el siglo XVII, textos sobre economía moderna. Habló junto con Quesnay de anatomía y de fisiología social, estudiaron la renta a través de las clases sociales del mismo modo que la sangre entre los diversos órganos del cuerpo humano. Petty distinguió dos factores de producción: el trabajo y la tierra "el trabajo es el padre...de la riqueza y la tierra es su madre".
Adam Smith desarrolló teorías de los sentimientos en su libro La Teoría de los Sentimiento Morales publicado en 1759: los individuos se mueven por el interés individual, amor propio y no solamente son movidos por interés individual sino que en el corazón humano tienen los sentimientos de simpatía.
¿Qué es el mercantilismo?
Un conjunto de políticas o ideas económicas que se desarrollaron durante los siglos XVI, XVII y la primera mitad del XVIII en Europa
¿Qué es un proceso económico?
Es el conjunto de actividades económicas que realiza el hombre con el fin de obtener los medios que le permitan satisfacer sus necesidades. Es realizado en sociedad y es un proceso continuo e interrelacionado que se agrupa en 5 fases: producción, circulación, distribución, consumo, inversión

PENSAMIENTO ECONOMICA DEL SIGLO XVII Y XVIII

Las cuestiones económicas han preocupado a muchos intelectuales a lo largo de los siglos. En la antigua Grecia, Aristóteles y Platón disertaron sobre los problemas relativos a la riqueza, la propiedad y el comercio. Durante la edad media predominaron las ideas de la Iglesia católica apostólica romana, se impuso el Derecho canónico, que condenaba la usura (el cobro de intereses abusivos a cambio de efectivo) y consideraba que el comercio era una actividad inferior a la agricultura.
La economía, como ciencia moderna independiente de la filosofía y de la política, data de la publicación de la obra Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones (1776), del filósofo y economista escocés Adam Smith. El mercantilismo y las especulaciones de los fisiócratas precedieron a la economía clásica de Smith y sus seguidores del siglo XIX.

 MercantilismoEl desarrollo de los modernos nacionalismos a lo largo del siglo XVI desvió la atención de los pensadores de la época hacia cómo incrementar la riqueza y el poder de las naciones Estado. La política económica que imperaba en aquella época, el mercantilismo, fomentaba el autoabastecimiento de las naciones. Esta doctrina económica imperó en Inglaterra y en el resto de Europa occidental desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII.
Los mercantilistas consideraban que la riqueza de una nación dependía de la cantidad de oro y plata que tuviese. Aparte de las minas de oro y plata descubiertas por España en el Nuevo Mundo, una nación sólo podía aumentar sus reservas de estos metales preciosos vendiendo más productos a otros países de los que compraba de ellos. El conseguir una balanza de pagos con saldo positivo implicaba que los demás países tenían que pagar la diferencia con oro y plata.
Los mercantilistas daban por sentado que su país estaría siempre en guerra con otros, o preparándose para la próxima contienda. Si tenían oro y plata, los dirigentes podrían pagar a mercenarios para combatir, como hizo el rey Jorge III de Inglaterra durante la guerra de la Independencia estadounidense. En caso de necesidad, el monarca también podría comprar armas, uniformes y comida para los soldados.
Esta preocupación mercantilista por acumular metales preciosos también afectaba a la política interna. Era imprescindible que los salarios fueran bajos y que la población creciese. Una población numerosa y mal pagada produciría muchos bienes a un precio lo suficiente bajo como para poder venderlos en el exterior. Se obligaba a la gente a trabajar jornadas largas, y se consideraba un despilfarro el consumo de té, ginebra, lazos, volantes o tejidos de seda. De esta filosofía también se deducía que, cuanto antes empezaran a trabajar los niños, mejor para el país. Un autor mercantilista tenía un plan para los niños de los pobres: "cuando estos niños tienen cuatro años, hay que llevarlos al asilo para pobres de la región, donde se les enseñará a leer durante dos horas al día, y se les tendrá trabajando el resto del día en las tareas que mejor se ajusten a su edad, fuerza y capacidad".

Fisiocracia Esta doctrina económica estuvo en boga en Francia durante la segunda mitad del siglo XVIII y surgió como una reacción ante las políticas restrictivas del mercantilismo. El fundador de la escuela, François Quesnay, era médico de cabecera en la corte del rey Luis XV. Su libro más conocido, Tableau Économique (Cuadro económico, 1758), intentaba establecer los flujos de ingresos en una economía, anticipándose a la contabilidad nacional, creada en el siglo XX. Según los fisiócratas, toda la riqueza era generada por la agricultura; gracias al comercio, esta riqueza pasaba de los agricultores al resto de la sociedad. Los fisiócratas eran partidarios del libre comercio y del laissez-faire (doctrina que defiende que los gobiernos no deben intervenir en la economía). También sostenían que los ingresos del Estado tenían que provenir de un único impuesto que debía gravar a los propietarios de la tierra, que eran considerados como la clase estéril. Adam Smith conoció a los principales fisiócratas y escribió sobre sus doctrinas, casi siempre de forma positiva.
 Adam SmithEn su famoso tratado La riqueza de las naciones, Adam Smith sostenía que la competencia privada libre de regulaciones produce y distribuye mejor la riqueza que los mercados controlados por los gobiernos. Desde 1776, cuando Smith escribió su obra, su razonamiento ha sido utilizado para justificar el capitalismo y evitar la intervención gubernamental en el comercio y el cambio. Según Smith, los empresarios privados que buscan su propio interés organizan la economía de manera más eficaz "como por una mano invisible".

La escuela clásicaComo cuerpo de teoría económica coherente, la economía clásica parte de los escritos de Smith y continúa con la obra de los economistas británicos Thomas Robert Malthus y David Ricardo; y culmina con la síntesis de John Stuart Mill, discípulo de Ricardo. Aunque eran frecuentes las divergencias entre los economistas clásicos que hubo en los 75 años que van desde la publicación de Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones de Smith (1776), hasta los Principios de economía política de Mill (1848), los economistas pertenecientes a esta escuela coincidían en los conceptos principales. Todos defendían la propiedad privada, los mercados y creían, como decía Mill, que "sólo a través del principio de la competencia tiene la economía política una pretensión de ser ciencia". Compartían la desconfianza de Smith hacia los gobiernos, y su fe ciega en el poder del egoísmo y su famosa "mano invisible", que hacía posible que el bienestar social se alcanzara mediante la búsqueda individual del interés personal. Los clásicos obtuvieron de Ricardo el concepto de rendimientos decrecientes, que afirma que a medida que se aumenta la fuerza de trabajo y el capital que se utiliza para labrar la tierra, disminuyen los rendimientos o, como decía Ricardo, "superada cierta etapa, no muy avanzada, el progreso de la agricultura disminuye de una forma paulatina".
El alcance de la ciencia económica se amplió de manera considerable cuando Smith subrayó el papel del consumo sobre el de la producción. Smith confiaba en que era posible aumentar el nivel general de vida del conjunto de la comunidad. Defendía que era esencial permitir que los individuos intentaran alcanzar su propio bienestar como medio para aumentar la prosperidad de toda la sociedad.
En el lado opuesto, Malthus, en su conocido e influyente Ensayo sobre el principio de la población (1798), planteaba la nota pesimista a la escuela clásica, al afirmar que las esperanzas de mayor prosperidad se escollarían contra la roca de un excesivo crecimiento de la población. Según Malthus, los alimentos sólo aumentaban adecuándose a una progresión aritmética (2-4-6-8-10, etc.), mientras que la población se duplicaba cada generación (2-4-8-16-32, etc.), salvo que esta tendencia se controlara, o por la naturaleza o por la propia prudencia de la especie. Malthus sostenía que el control natural era 'positivo': "El poder de la población es tan superior al poder de la tierra para permitir la subsistencia del hombre, que la muerte prematura tiene que, frenar hasta cierto punto el crecimiento del ser humano". Este procedimiento de frenar el crecimiento eran las guerras, las epidemias, la peste, las plagas, los vicios humanos y las hambrunas, que se combinaban para controlar el volumen de la población mundial y limitarlo a la oferta de alimentos.
La única forma de escapar a este imperativo de la humanidad y de los horrores de un control positivo de la naturaleza, era la limitación voluntaria del crecimiento de la población, no mediante un control de natalidad, contrario a las convicciones religiosas de Malthus, sino retrasando la edad para casarse, reduciendo así el volumen de las familias. Las doctrinas pesimistas de este autor clásico dieron a la economía el sobrenombre de 'ciencia lúgubre'.
Los Principios de economía política de Mill constituyeron el centro de esta ciencia hasta finales del siglo XIX. Aunque Mill aceptaba las teorías de sus predecesores clásicos, confiaba más en la posibilidad de educar a la clase obrera para que limitase su reproducción de lo que lo hacían Ricardo y Malthus. Además, Mill era un reformista que quería gravar con fuerza las herencias, e incluso permitir que el gobierno asumiera un mayor protagonismo a la hora de proteger a los niños y a los trabajadores. Fue muy crítico con las prácticas que desarrollaban las empresas y favorecía la gestión cooperativa de las fábricas, por parte de los trabajadores. Mill representa un puente entre la economía clásica del laissez-faire y el Estado de bienestar.
Los economistas clásicos aceptaban la Ley de Say sobre los mercados, fundada por el economista francés Jean Baptiste Say. Esta ley sostiene que el riesgo de un desempleo masivo en una economía competitiva es despreciable, porque la oferta crea su propia demanda, limitada por la cantidad de mano de obra y los recursos naturales disponibles para producir. Cada aumento de la producción aumenta los salarios y los demás ingresos que se necesitan para poder comprar esa cantidad adicional producida.

 Escuela clásica de economíaThomas Malthus, David Ricardo y John Stuart Mill, junto a Adam Smith, forman la denominada escuela clásica de economía. Los cuatro creían en la propiedad privada, el libre mercado y la competencia. Malthus, Ricardo y Mill, sin embargo, alentaban la regulación gubernamental de la economía en ciertos casos. Thomas MalthusMalthus ofreció una teoría pesimista de la economía, centrada en la escasez de recursos y el crecimiento de la población. Malthus creía que la población humana crece en progresión geométrica (1,2,4,8,...) mientras que los recursos, en concreto los recursos agrícolas, crecen sólo en progresión aritmética (1,2,3,4,...); por ello, a la larga, la escasez de alimentos debe reducir al hambre a la mayoría de la gente. Defendió una limitación moral, sugiriendo que la gente se casara tarde y formara familias pequeñas. Malthus también reconoció el papel de las plagas, guerras y epidemias en la contención de la superpoblación. Por estas ideas, la economía adquirió el nombre de "la ciencia lúgubre".

MarxismoLa oposición a la escuela de pensamiento clásico vino de la mano de los primeros autores socialistas, como el filósofo social francés, Claude Henri de Rouvroy conde de Saint-Simon, y del utópico británico Robert Owen. Sin embargo, fue Karl Marx el autor de las teorías económicas socialistas más importantes.
Para la perspectiva clásica del capitalismo, el marxismo representó una seria recusación, aunque no dejaba de ser, en algunos aspectos, una variante de la temática clásica. Por ejemplo, Marx adoptó la teoría del valor trabajo de Ricardo. Con algunas matizaciones, Ricardo explicó que los precios eran la consecuencia de la cantidad de trabajo que se necesitaba para producir un bien. Ricardo formuló esta teoría del valor para facilitar el análisis, de forma que se pudiera entender la diversidad de precios. Para Marx, la teoría del valor trabajo representaba la clave del modo de proceder del capitalismo, la causa de todos los abusos y de toda la explotación generada por un sistema injusto.
Exiliado de Alemania, Marx pasó muchos años en Londres, donde vivió gracias a la ayuda de su amigo y colaborador Friedrich Engels, y a los ingresos derivados de sus ocasionales contribuciones en la prensa. Desarrolló su extensa teoría en la biblioteca del Museo Británico. Los estudios históricos y los análisis económicos de Marx convencieron a Engels de que los beneficios y los demás ingresos procedentes de una explotación sin escrúpulos de las propiedades y las rentas son el resultado del fraude y el poder que ejercen los fuertes sobre los débiles. Sobre esta crítica se alza la crítica económica que desemboca en la certificación histórica de la lucha de clases.
La 'acumulación primitiva' en la historia económica de Inglaterra fue posible gracias a la delimitación y al cercamiento de las tierras. Durante los siglos XVII y XVIII los terratenientes utilizaron su poder en el Parlamento para quitar a los agricultores los derechos que por tradición tenían sobre las tierras comunales. Al privatizar estas tierras, empujaron a sus víctimas a las ciudades y a las fábricas.
Sin tierras ni herramientas, los hombres, las mujeres y los niños tenían que trabajar para conseguir un salario. Así, el principal conflicto, según Marx, se producía entre la denominada clase capitalista, que detentaba la propiedad de los medios de producción (fábricas y máquinas) y la clase trabajadora o proletariado, que no tenía nada, salvo sus propias manos. La explotación, eje de la doctrina de Karl Marx, se mide por la capacidad de los capitalistas para pagar sólo salarios de subsistencia a sus empleados, obteniendo de su trabajo un beneficio (o plusvalía), que era la diferencia entre los salarios pagados y los precios de venta de los bienes en los mercados.
Aunque en el Manifiesto Comunista (1848) Marx y Engels pagaban un pequeño tributo a los logros materiales del capitalismo, estaban convencidos que estos logros eran transitorios y que las contradicciones inherentes al capitalismo y al proceso de lucha de clases terminarían por destruirlo, al igual que en el pasado había ocurrido con el extinto feudalismo medieval.
A este respecto, los escritos de Marx se alejan de la tradición de la economía clásica inglesa, siguiendo la metafísica del filósofo alemán George Wilhelm Friedrich Hegel, el cual consideraba que la historia de la humanidad y de la filosofía era una progresión dialéctica: tesis, antítesis y síntesis. Por ejemplo, una tesis puede ser un conjunto de acuerdos económicos, como el feudalismo o el capitalismo. Su contrapuesto, o antítesis, sería, por ejemplo, el socialismo, como sistema contrario al capitalismo. La confrontación de la tesis y la antítesis daría paso a una evolución, que sería la síntesis, en este caso, el comunismo que permite combinar la tecnología capitalista con la propiedad pública de las fábricas y las granjas.
A largo plazo, Marx creía que el sistema capitalista desaparecería debido a que su tendencia a acumular la riqueza en unas pocas manos provocaría crecientes crisis debidas al exceso de oferta y a un progresivo aumento del desempleo. Para Marx, la contradicción entre los adelantos tecnológicos, y el consiguiente aumento de la eficacia productiva, y la reducción del poder adquisitivo que impediría adquirir las cantidades adicionales de productos, sería la causa del hundimiento del capitalismo.
Según Marx, las crisis del capitalismo se reflejarían en un desplome de los beneficios, una mayor conflictividad entre trabajadores y empresarios e importantes depresiones económicas. El resultado de esta lucha de clases culminaría en la revolución y en el avance hacia, en primer lugar, el socialismo, para al fin avanzar hacia la implantación gradual del comunismo. En una primera etapa todavía sería necesario tener un Estado que eliminara la resistencia de los capitalistas. Cada trabajador sería remunerado en función de su aportación a la sociedad. Cuando se implantara el comunismo, el Estado, cuyo objetivo principal consiste en oprimir a las clases sociales, desaparecería, y cada individuo percibiría, en ese porvenir utópico, en razón de sus necesidades.

Los neoclásicosLa economía clásica partía del supuesto de escasez, como lo muestra la ley de rendimientos decrecientes y la doctrina malthusiana sobre la población. A partir de la década de 1870, los economistas neoclásicos como William Stanley Jevons en Gran Bretaña, Léon Walras en Francia, y Karl Menger en Austria, imprimieron un giro a la economía, abandonaron las limitaciones de la oferta para centrarse en la interpretación de las preferencias de los consumidores en términos psicológicos. Al fijarse en el estudio de la utilidad o satisfacción obtenida con la última unidad, o unidad marginal, consumida, los neoclásicos explicaban la formación de los precios, no en función de la cantidad de trabajo necesaria para producir los bienes, como en las teorías de Ricardo y de Marx, sino en función de la intensidad de la preferencia de los consumidores en obtener una unidad adicional de un determinado producto.
El economista británico Alfred Marshall, en su obra maestra, Principios de Economía (1890), explicaba la demanda a partir del principio de utilidad marginal, y la oferta a partir del coste marginal (coste de producir la última unidad). En los mercados competitivos, las preferencias de los consumidores hacia los bienes más baratos y la de los productores hacia los más caros, se ajustarían para alcanzar un nivel de equilibrio. Ese precio de equilibrio sería aquel que hiciera coincidir la cantidad que los compradores quieren comprar con la que los productores desean vender.
Este equilibrio también se alcanzaría en los mercados de dinero y de trabajo. En los mercados financieros, los tipos de interés equilibrarían la cantidad de dinero que desean prestar los ahorradores y la cantidad de dinero que desean pedir prestado los inversores. Los prestatarios quieren utilizar los préstamos que reciben para invertir en actividades que les permitan obtener beneficios superiores a los tipos de interés que tienen que pagar por los préstamos. Por su parte, los ahorradores cobran un precio a cambio de ceder su dinero y posponer la percepción de la utilidad que obtendrán al gastarlo. En el mercado de trabajo se alcanza asimismo un equilibrio. En los mercados de trabajo competitivos, los salarios pagados representan, por lo menos, el valor que el empresario otorga a la producción obtenida durante las horas trabajadas, que tiene que ser igual a la compensación que desea recibir el trabajador a cambio del cansancio y el tedio laboral.
La doctrina neoclásica es, de forma implícita, conservadora. Los defensores de esta doctrina prefieren que operen los mercados competitivos a que haya una intervención pública. Al menos hasta la Gran Depresión de la década de 1930, se defendía que la mejor política era la que reflejaba el pensamiento de Adam Smith: bajos impuestos, ahorro en el gasto público y presupuestos equilibrados. A los neoclásicos no les preocupa la causa de la riqueza, explican que la desigual distribución de ésta y de los ingresos, se debe en gran medida a los distintos grados de inteligencia, talento, energía y ambición de las personas. Por lo tanto, el éxito de cada individuo depende de sus características individuales, y no de que se beneficien de ventajas excepcionales o sean víctimas de una incapacidad especial. En las sociedades capitalistas, la economía clásica es la doctrina predominante a la hora de explicar la formación de los precios y el origen de los ingresos.

Economía keynesianaJohn Maynard Keynes fue alumno de Alfred Marshall y defensor de la economía neoclásica hasta la década de 1930. La Gran Depresión sorprendió a economistas y políticos por igual. Los economistas siguieron defendiendo, a pesar de la experiencia contraria, que el tiempo y la naturaleza restaurarían el crecimiento económico si los gobiernos se abstenían de intervenir en el proceso económico. Por desgracia, los antiguos remedios no funcionaron. En Estados Unidos, la victoria en las elecciones presidenciales de Franklin D. Roosevelt (1932) sobre Herbert Hoover marcó el final político de las doctrinas del laissez-faire.
Se necesitaban nuevas políticas y nuevas explicaciones, que fue lo que en ese momento proporcionó Keynes. En su imperecedera Teoría general sobre el empleo, el interés y el dinero (1936), aparecía un axioma central que puede resumirse en dos grandes afirmaciones: (1) las teorías existentes sobre el desempleo no tenían ningún sentido; ni un nivel de precios elevado ni unos salarios altos podían explicar la persistente depresión económica y el desempleo generalizado. (2) Por el contrario, se proponía una explicación alternativa a estos fenómenos que giraba en torno a lo que se denominaba demanda agregada, es decir, el gasto total de los consumidores, los inversores y las instituciones públicas. Cuando la demanda agregada es insuficiente, decía Keynes, las ventas disminuyen y se pierden puestos de trabajo; cuando la demanda agregada es alta y crece, la economía prospera.
A partir de estas dos afirmaciones genéricas, surgió una poderosa teoría que permitía explicar el comportamiento económico. Esta interpretación constituye la base de la macroeconomía contemporánea. Puesto que la cantidad de bienes que puede adquirir un consumidor está limitada por los ingresos que éste percibe, los consumidores no pueden ser responsables de los altibajos del ciclo económico. Por lo tanto, las fuerzas motoras de la economía son los inversores (los empresarios) y los gobiernos. Durante una recesión, y también durante una depresión económica, hay que fomentar la inversión privada o, en su defecto, aumentar el gasto público. Si lo que se produce es una ligera contracción, hay que facilitar la concesión de créditos y reducir los tipos de interés (sustrato fundamental de la política monetaria), para estimular la inversión privada y restablecer la demanda agregada, aumentándola de forma que se pueda alcanzar el pleno empleo. Si la contracción de la economía es grande, habrá que incurrir en déficits presupuestarios, invirtiendo en obras públicas o concediendo subvenciones a fondo perdido a los colectivos más perjudicados.
 John Maynard Keynes
John Maynard Keynes planteó soluciones para superar la Gran Depresión en su obra Teoría general sobre el empleo, el interés y el dinero (1936). Keynes creía que el elevado desempleo era el resultado de la falta de demanda de productos y servicios. Sugirió que los gobiernos se hicieran cargo del déficit invirtiendo en obras públicas y otros proyectos para incrementar la demanda y el consumo. Las propuestas de Keynes influyeron y respaldaron la política del New Deal del presidente Franklin Roosevelt, incluidas las oficinas de empleo, que crearon trabajos en obras públicas para los desempleados.

Economía analíticaTanto la teoría neoclásica de los precios como la teoría keynesiana de los ingresos han sido desarrolladas de forma analítica por matemáticos, utilizando técnicas de cálculo, álgebra lineal y otras sofisticadas técnicas de análisis cuantitativo. En la especialidad denominada econometría se une la ciencia económica con la matemática y la estadística. Los económetras crean modelos que vinculan cientos, a veces miles de ecuaciones, para intentar explicar el comportamiento agregado de una economía. Los modelos econométricos son utilizados por empresas y gobiernos como herramientas de predicción, aunque su grado de precisión no es ni mayor ni menor que cualquier otra técnica de previsión del futuro.
El análisis operativo y el análisis input-output son dos especialidades en las que cooperan los expertos en análisis económico y los matemáticos. El análisis operativo subraya la necesidad de plantear los problemas de una manera sistemática. Por lo general, se trata de coordinar los distintos departamentos y las diferentes operaciones que tienen lugar en el seno de una corporación que dirige varias fábricas, produciendo muchos bienes, por lo que hay que utilizar las instalaciones de forma que se puedan minimizar los costes y maximizar la eficiencia. Para ello se acude a ingenieros, economistas, psicólogos laboralistas, estadísticos y matemáticos.
Según su propio inventor, el economista estadounidense, de origen ruso, Wassily Leontief, las tablas input-output "describen el flujo de bienes y servicios entre todos los sectores industriales de una economía durante determinado periodo". Aunque la construcción de esta tabla es muy compleja, este método ha revolucionado el pensamiento económico. Hoy está muy extendido como método de análisis, tanto en los países socialistas como en los capitalistas.

miércoles, 9 de marzo de 2011

LIMITES DE POSIBILIDADES PRODUCIDAS (graficas)



Latifundios de Gonzalo N. Santos, del general Terrazas y de la familia Sánches Navarro

Gonzalo N. Santos (1896-1979)
Revolucionario. Nació en Villa Guerrero (hoy Tamuín), S.L.P. Murió en el Distrito Federal. Alcanzó el grado de General de División. Fue miembro fundador del Partido Nacional Revolucionario, también del Partido de la Revolución Mexicana y del Partido Revolucionario Institucional. Tuvo altos cargos en este partido, destaca el de Secretario general del Comité Ejecutivo Nacional. De 1924 a 1934 fue Diputado federal .Senador de 1934 a 1940. De 1943 a 1949 fue Gobernador del estado de San Luís Potosí, lo que le permitió implantar un cacicazgo (principalmente en la huasteca potosina), este perdió fuerza durante el sexenio del presidente Adolfo López Mateos y terminó con el régimen de López Portillo al afectarle su latifundio El Gargaleote, el mayor de San Luís Potosí y uno de los de mayores dimensiones de la República. También fue embajador en Bélgica (1940) y director de Pesca de la Secretaría de Industria y Comercio. (1956-1961)


El Gargaleote, uno de los latifundios más grandes del país, conformado gracias a una concesión ganadera que Cárdenas otorgó a Gonzalo N. Santos –el cual fue protegido por dos ex Presidentes-, con una superficie cercana a las 14 mil hectáreas, fue afectado en 6 mil 282 de éstas, ya que fueron ocupadas por mil campesinos en una operación incruenta vigilada por efectivos del Ejército “en apoyo a las instituciones del país, en este caso la SRA”. La resolución presidencial afectatoria de El Gargaleote beneficia a 133 campesinos solicitantes de tierras de los poblados de Ahuacatitla y Cuatzontitla, del municipio de Villa Terrazas, así como del poblado de Tanzaquil, del municipio de Coxcatlán, en San Luís Potosí.
 
Latifundio del general Luís Terrazas Fuentes


Luís Terrazas Fuentes fue el más grande latifundista mexicano. Nació en la ciudad de Chihuahua el 20 de julio de 1829. Hijo de Juan José Terrazas y de Petra Fuentes, ocupó el segundo lugar de este matrimonio. Perdió a su padre a causa del cólera. A los 21 años se convierte en el jefe de familia, ya que su hermano mayor había muerto de pequeño. Además de su madre, contaba con 4 hermanas. Las nuevas responsabilidades las enfrentaría con una herencia modesta y una formación familiar tradicional. Siendo soltero tuvo una hija a la cual nombró Guadalupe. En 1852, a la edad de 22 años, ocupó su primer puesto público como guardia fiscal de la Administración General de Rentas. Ese mismo año se casó con Carolina Cuilty Bustamante, descendiente de Gabino Cuilty, un irlandés nacido en Cuba, propietario de una hacienda al noroeste de la ciudad de Chihuahua. El año siguiente resultó electo regidor del municipio de Chihuahua para el bienio 1854-1855.


La Hacienda de Encinillas fue la más importante de su latifundio; la compró en sociedad con Henry Müller, estadounidense de origen alemán avecindado en Chihuahua. La finca había sido confiscada por el gobierno federal en 1865 al Doctor José Pablo Martínez del Río, patriarca de una de las familias más ricas del país durante el Siglo XIX y la primera mitad del Siglo XX, al ser forzado al exilio en Italia en afán de venganza por Benito Juárez, por su apoyo al Imperio de Maximiliano de Habsburgo. Terrazas y Müller eran los arrendatarios del predio desde 1860, posteriormente la compraron al gobierno federal en 1866, y en 1868 Luis compra su parte a Müller.
El latifundio terracista llegó a sumar más de 2 millones de hectáreas. La sensación era que Chihuahua entera pertenecía a Luis Terrazas.


Terrazas usaba el crédito en forma regular, pedía prestado y prestaba por igual. En varias ocasiones dio la mayoría de sus bienes en garantía hipotecaria para poder realizar otras operaciones más ambiciosas. Las adquisiciones rurales seguían un patrón: una vez comprada una hacienda continuaba aumentando su superficie mediante la compra de predios colindantes. Este modelo se observa en la Hacienda de El Carmen, adquirida por partes a los copropietarios, que llegaron a sumar 26. Años más tarde, durante la disolución del latifundio, Terrazas acreditó su propiedad con el gran número de compras que realizó durante 50 años.


La extensión y el número de las propiedades permitieron a Terrazas especializar sus haciendas; durante los primeros años del siglo XX dedicaba unas al trigo, como la de San Isidro; otras contaban con toros de lidia, como la de San Miguel, y otras con ovinos, como Gallego.

Latifundio de la familia Sánchez Navarro


Santiago de la Monclova era un lugar difícil para aquél que pretendiera hacer fortuna. Una monótona villa, con casas de adobe apiñadas alrededor de una polvorienta plaza. Así era la capital de Coahuila o Nueva Extremadura en el año de 1767, una villa conformada tan sólo por unos cientos de familias, 35 soldados del presidio marcado todo por una pobreza extrema.
Llegar a ser párroco de esta villa era una alternativa de la que nadie pudiera ufanarse, pero para el padre José Miguel Sánchez Navarro representó la oportunidad de construir a partir de 1765 un gran imperio económico, y asistido por sus hermanos formó un latifundio que lo convirtió en el más opulento de los hacendados de la Nueva España.


En menos de un siglo, a caballo entre la Colonia y el México independiente, la familia Sánchez Navarro constituyó en Coahuila el mayor latifundio que ha existido no sólo en México, sino en toda Latinoamérica.
Con 7 millones 347,450 hectáreas, equivalentes a unos 66,766 kilómetros cuadrados, ese latifundio tenía una dimensión similar a la de Portugal. Abarcaba prácticamente la mitad de Coahuila y porciones de Nuevo León, Zacatecas y Durango.

 

Limite de posibilidades de producción

1.-piensese por un mundo a vitado  por 3 personas. Si una de ellas se convierte en agricultor la otra en creador de ganado y la tercera en constructor de casas, explicar porque el intercambio  seria esencial.

Porque el agricultor necesita del creador de ganado y del constructor de casas, el creador de ganado necesito del agricultor y del constructor de casas y el constructor de casas necesita del agricultor y del creador de ganado.
2--¿Es el  aire un  recurso escaso?
si ya que la mayoría de aire está contaminado y es poco el que no esta
3.- ¿y la arena en el desierto de Sahara?
Pues yo pienso que no porque la arena no se termina y menos en un desierto
4.- ¿la tierra agrícola en Guanajuato? Analizar
Pues yo pienso que si porque si por que muchas tierras se han transformado en infértiles y hay muy pocas que son fértiles
5.- ¿piénsese en una isla solo produce lácteos  y naranjas utilizar la ley de los costos crecientes para explicar que le ocurría al costo de oportunidad de las naranjas si se bajara su producción?
Si se trabajaran a la mitad de la producción las naranjas, también afectaría la producción de lácteos ya que la economía de la isla, depende del buen funcionamiento y relaciones entre estas dos.

jueves, 3 de marzo de 2011

“RELACION DE LA ECONOMIA CON OTRAS CIENCIAS”
Ciencias Sociales: La economía ha sido ubicada obviamente en el campo de las ciencias sociales, por lo que debemos auxiliarnos de las demás ciencias para darle mayor consistencia y fortaleza.
Economía y Psicología: La economía estudia el comportamiento de los consumidores en el mercado en el que estudia variables que estudia la psicología, como los gustos, temores, miedos, esperanzas, etc.
Derecho: es el conjunto de principios y de normas jurídicas que regulan la cooperación humana en las actividades de creación, distribución, consumo y cambio de la riqueza generada por un sistema económico.
Administración: Es el proceso de planeación, dirección y control del trabajo de los miembros de la organización y de usar los recursos disponibles para alcanzar las metas establecidas. El principio fundamental económico es la llamada ley de oro.
Historia: Estudia a la humanidad y sus procesos económicos a través del materialismo histórico y su principal impulsor que fue Karl Marx. Las siguientes son las relaciones sociales de producción y estructura económica de la historia:


Consumismo primitivo
·         Usaban lanzas y trampas de caza.
·         Se comunicaban por medio de signos.
·         Cazaban en bandas.
Sociedad esclavista
·         Aparecen nuevas religiones
·         Hay nuevos dioses.
Feudalismo
·         Actividad económica la agricultura
·         El siervo no poseía las tierras
Capitalismo
·         Es un sistema económico de producción que difiere de todos los modos de producción anteriores.
Modo de producción socialista
·         Disminuye la crisis económica
·         Disminuye la explotación de hombres
·         Las clases sociales ya no son tan antagónicas.




Ciencias Naturales: Es reconocer y aceptar ala naturaleza con sus leyes y principios, los cuales debemos respectar y retroalimentar con la ciencia económica producto del ser humano, quien la ha orientado hacia la ganancia, el poder, los interese de grupos y no hacia intereses humanos integrales.
Ecología: Es la más importante de las ciencias en relación con la subsistencia  a largo plazo. Lo que la ecología estudia es la economía de los animales y las plantas.
Física: Es la relación de estas dos ciencias la cual es la segunda ley de la termodinámica que dice: “S i se aísla un ser vivo, privándolo de materia y energía del exterior, el segundo principio se cumple en todo su amplitud: el ser vivo evoluciona hacia el desorden total, muriendo.”
Química: Esta relación aparentemente disímbola no lo es, por lo cual analiza en forma breve los ciclos del carbono, del oxigeno y del nitrógeno para observar la simbiosis de estas dos ciencias.

“PRINCIPALES PROBLEMAS ECONOMICOS”
Lo principal en cualquier economía es saber “que”, “como” y “para quien” se produce.
¿Qué Producir?
No solamente hay que establecer que bienes y servicios se producirá, sino también  en que cantidades se producirán.  Sabemos que nuestro país no es autosuficiente y que prevalece una gran escasez, sobre todo en le producción de alimentos ya que algunos alimentos son importados.
¿Cómo Producir?
Esta pregunta está íntimamente ligada con el desarrollo de la técnica; por ejemplo en la producción de granos ya que incluye la aplicación de la ciencia t la tecnología, ya que el agricultor moderno utiliza tractores, trilladoras, fertilizantes, crédito, educación, etc.
¿Para quién Producir?
Esto está en función del poder adquisitivo, es decir, los ingresos, preferencias y gustos de los consumidores. Los bienes y servicios para el intercambio se denominan mercancía y estas son para la venta y deben satisfacer necesidades que resultan de utilidad para alguien.